Por supuesto que dicho deseo no es más que una forma por medio de la cual encontrar un alivio ante el azote inclemente de las consecuencias de nuestras acciones u omisiones en el pasado.
El asunto es que - como todos sabemos - todavía no se ha diseñado el artilugio que nos permita viajar al pasado.
Y si nos ceñimos a las últimas teorías, dicho dispositivo jamás podrá existir ya que ello conllevaría un caos enorme debido a las teóricas consecuencias de los cambios que todos realizaríamos.
Tal y como dice la canción el presente es lo único que tenemos y si persistimos en añorar el pasado y en temerle - o peor aun: menospreciarle - al futuro lo único que estaremos consiguiendo es desperdiciar ese valioso activo con el que contamos, con cada avance del segundero y fabricar las futuras añoranzas de todo lo q hicimos o dejamos de hacer AHORA.
Tratemos de darnos cuenta de ello, de manera que sepamos que el tiempo se acaba y de que es uno de los bienes más valiosos con el que contamos.
Siendo así dejemos de lamentarnos; curemos nuestras heridas; perdonémonos a nosotros mismos; determinemos que es lo que queremos del futuro; diseñemos un plan de trabajo para alcanzarlo y luego manos a la obra.
Así de sencillo y así de simple.
No hay comentarios:
Publicar un comentario